Vuelta al cole



Sigue la coyuntura económica su curso previsto. La eurozona empieza a salir de la recesión, impulsada por una reactivación progresiva del consumo y la inversión y favorecida por un calendario más acompasado del ajuste fiscal, mal que le pese al Bundesbank.

Los datos económicos del verano van mostrando también como la economía española modera su caída, estimulada por la buena campaña turística y, sobre todo, por el dinamismo de los mercados exteriores. Se alcanza el equilibrio exterior, la regresión de la economía parece alcanzar su fin y el mercado laboral lentamente se despereza.

Pero no nos engañemos: continuamos en las últimas filas del pelotón de los torpes. Salir de una crisis es algo mucho más profundo que un cambio de signo en el crecimiento intertrimestral del PIB: no habrá reactivación decente sin un crecimiento sostenido que se acompañe de creación de empleo, que no genere mermas de productividad y que no se sustente en el endeudamiento exterior. ¿Se han transformado nuestra estructura productiva y reformado nuestros mercados adecuadamente? Pronto lo sabremos.

Sabe bien el labrador que pretender que las lluvias primaverales y el sol veraniego le hagan todo su trabajo es una necedad, si lo que pretende obtener es una buena cosecha. Como es fácil prever, hasta bien entrado el año próximo no sabremos si las semillas plantadas han germinado bien. Difícil será si no se poda y riega convenientemente, es decir, se combinan con habilidad reformas y estímulos. Y aunque durante el segundo semestre de 2013 la caída se detenga o incluso se revierta la regresión, cerraremos el ejercicio con un descenso del PIB cercano al 1%. Y sobre las consecuencias de las reformas emprendidas todavía hay mucho que hablar.

¿Y la deuda pública? Por favor seamos serios. La deuda crece pero no sólo a causa del déficit público. Esta misma semana el Banco de España mostraba como las inyecciones de capital público en el proceso de reestructuración bancaria ya equivalen al 6% del PIB. Y cuando el déficit persiste, pese al recorte de gastos y el aumento de presión fiscal, se trata de activar las bases imponibles, actuando sobre el fraude fiscal, reduciendo privilegios e incentivando la actividad económica. Pongámonos a ello.

Feliz regreso de vacaciones!

(Reproducción del comentario de hoy en Gestiona Radio)

Aquí teneis acceso al audio: Vuelta al cole

Comentaris

Entrades populars d'aquest blog

Volcà islandès

Das Auto

Foc grec